Nina Petrova: La letal francotiradora soviética que Stalin borró de la historia durante la Segunda Guerra Mundial.
Nina Petrova: La Letal Francotiradora Soviética que Stalin Borró de la Historia durante la Segunda Guerra Mundial.
Siempre me ha fascinado descubrir historias ocultas de héroes olvidados. Una de esas figuras que capturó mi atención fue Nina Petrova, conocida como la letal francotiradora soviética que segó la vida de más de 100 soldados nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Su legado fue opacado por su avanzada edad y un trágico final. La propaganda soviética decidió ocultar su historia.
Hoy quiero compartirte la historia de esta increíble mujer. Una figura que desafió estereotipos y se convirtió en una leyenda en el frente de batalla.
Los Primeros Años de Nina Petrova: Preparación para la Guerra
Nina Petrova nació el 27 de julio de 1893 en Oranienbaum, actual Lomonósov, Rusia. Su infancia no fue fácil. Perdió a su padre temprano y tuvo que ayudar a su madre a criar a sus hermanos.
Desde joven mostró una inclinación por el deporte. Destacó en actividades como la natación, el baloncesto y el patinaje. Sin embargo, su habilidad más letal surgió poco antes de la guerra. Entonces comenzó a practicar tiro con fusil.
Con premios en competencias de tiro y el reconocimiento como instructora militar, Petrova fue reclutada por el Ejército Rojo en 1936. Allí entrenó a más de 500 tiradores de élite. Su habilidad con el fusil la llevó a ser asignada como instructora militar antes de que estallara el conflicto mundial.
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La Segunda Guerra Mundial: De Enfermera a Francotiradora Letal
Cuando Alemania lanzó la Operación Barbarroja en 1941, Nina Petrova tenía casi 50 años. A pesar de su edad, se ofreció como voluntaria para el ejército. Al principio fue asignada como enfermera. Pero el destino tenía otros planes para ella.
El Frente de Leningrado y los Nazis
Durante el asedio de Leningrado, Petrova demostró su valía como francotiradora. Se le atribuyen 122 bajas confirmadas, aunque algunas fuentes limitan este número a un centenar. También entrenó a más de 150 soldados para luchar contra los nazis.
A pesar de las dificultades, Petrova lideró una unidad de mujeres francotiradoras. Además, organizó ataques con artillería pesada. Su precisión y capacidad para liderar le valieron numerosas condecoraciones, incluida la prestigiosa Orden de la Gloria.
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El Reconocimiento Tardío y su Trágico Final
En 1945, Petrova recibió la Orden de la Gloria de manos del general Fedyuninsky. El comandante quedó asombrado al saber que tenía 52 años. Incluso le regaló un fusil de francotirador nuevo y una mira telescópica como muestra de admiración.
Sin embargo, su historia tuvo un final abrupto. Nina Petrova murió en un accidente automovilístico cuando el vehículo en el que viajaba cayó por un barranco. Esta tragedia, sumada a su avanzada edad, hizo que la propaganda de Stalin decidiera minimizar su legado. Prefirieron destacar a francotiradoras más jóvenes.
Legado de Nina Petrova: La Guerrera Olvidada
Aunque la historia intentó borrar su memoria, el legado de Nina Petrova vive a través de sus logros. Fue un símbolo de resistencia en tiempos oscuros. Su historia demostró que el coraje y la determinación no tienen edad.
Petrova nos recuerda que los verdaderos héroes a menudo permanecen en las sombras. Esperan ser redescubiertos por aquellos que buscan inspiración. Si deseas conocer más relatos de valentía y lucha durante la Segunda Guerra Mundial, te invito a explorar otros artículos en nuestro blog