La Guerra de Vietnam (2ª Parte) Derrota y Castigo
La Guerra se traslada a Laos y Camboya
Los acontecimientos más importantes en 1970, no ocurrieron en Vietnam, sino en la vecina Camboya. Bajo el Gobierno del Príncipe Norodom Sihanouk, Camboya había conservado los valores de la neutralidad y había evitado los rigores de la guerra. Pero Sihanouk se había visto obligado a pagar tributos por la relativa paz y tranquilidad que disfrutaba su país, por medio de importantes concesiones a ambas Vietnam (Norte y Sur). No obstante, Camboya había seguido siendo como una isla de tranquilidad en la agitada Indochina y aún había obtenido alguna prosperidad a causa de la guerra.
Thank you for reading this post, don't forget to subscribe!El Gobierno norvietnamita aprovechó la neutralidad de los Estados colindantes, Camboya e igualmente Laos, para trasladar, a través de sus territorios, los hombres y equipamientos necesarios para los encuentros en el sur. Además de eso, se utilizaron numerosas áreas fronterizas como “santuarios” (así lo llamaban los oficiales americanos) o bases de partida para acciones de guerrilla, sabiendo que allí podían refugiarse, ya que las fuerzas survietnamitas y las fuerzas aliadas no habrían violado la neutralidad de los países limítrofes.
Laos y Camboya, durante los primeros años de los sesenta, no estaban en grado de oponerse (creo que nunca lo estuvieron) al potente país vecino, sin embargo, desde 1964, el Príncipe Sihanouk demostró especialmente simpatía por el régimen norvietnamita. Permitió, entre otras cosas, la entrada en su propio territorio de personal militar chino, checoslovaco y soviético en apoyo de las fuerzas comunistas. Ello ocurría con el pesar de las jerarquías militares y de la Administración Pública.
La ruta Ho Chi Minh a través de Laos y Camboya
Base survietnamita de avanzada, estas representaban el supuesto escollo a los norvietnamitas en su avance al sur. Una de las bases más importantes en Vietnam fue la de Khe Sanh
El prolongado empeño de Sihanouk por mantener Camboya fuera de la guerra, terminó el 18 de marzo de 1970, cuando el Príncipe fue depuesto durante su ausencia, (se encontraba de visita oficial en Moscú y Pekín) por el general Lon Nol. El Estado se convirtió en una República orientada hacia occidente y se ordenó a los norvietnamitas abandonar territorio camboyano.
Desgraciadamente para Camboya, el general demostró ser un pésimo gobernante. Pronto Camboya se vió dividida por la guerra civil. A comienzos de abril ya había estallado la guerra entre los contingentes del vietcong acantonados en territorio camboyano y las fuerzas militares leales a Lon Nol. (FANA- Forces Armées Nationales Khmer).
La capital, Phnom Penh, cuyas comunicaciones con el mar habían sido cortadas, estaban, virtualmente, aisladas. Por esta razón el Gobierno norteamericano que había permanecido apartado, lanzó un programa de ayuda directa al régimen de Lon Nol.Al mismo tiempo, el cuerpo de infantería de marina, comenzó a planear una serie de operaciones a través del límite fronterizo camboyano a fin de aniquilar los reductos del vietcong y proporcionar un respiro a las hostigadas tropas camboyanas.
Las tropas survietnamitas ya habían entrado en Camboya el 14 de abril de 1970, rastreando una zona llamada “Ala de Ángel.” Pero los peores enemigos de Lon Nol serian los Jemeres Rojos. Los bombardeos de Estados Unidos, además de producir centenares de víctimas entre el campesinado, no habían hecho otra cosa que incrementar la ira y fuerza de los Jemeres Rojos. El Gobierno norteamericano con la aprobación del Congreso aumenta la asistencia militar a Lon Nol. Pero el Ejército del dictador fue presa fácil de los movimientos comunistas, mejor equipados, con mayor experiencia, por lo que no pudo contener ni la avanzada del vietcong ni la de los Jemeres Rojos. Poco a poco se cerraría la tenaza popular sobre la capital, Phnom Penh.
Los Estados Unidos, intentan como última solución al desastre político pactar el regreso del príncipe Sihanouk. Los norteamericanos al ver que no había nada que hacer, se retiran llevándose a su derrotado aliado. El 17 de abril de 1975, la capital cae en manos de los Jemeres Rojos, quienes se dedicarían a eliminar todo vestigio de la breve República Jemer de Lon Nol. Dirigidos por Pol Pot, conducirían al país a un peor drama: el genocidio camboyano.
Los MIG-21, fueron la contrapartida de los Phantom norteamericanos
El Gobierno comunista de Pol Pot, fue nombrado oficialmente como Kampuchea Democrática entre 1975 y 1979, donde este último año cae su Gobierno, al ser invadido Camboya por el Ejército vietnamita. Pol Pot huye junto a sus hombres a las selvas del norte, hasta el día de su muerte, acontecida el 15 de abril de 1998. De igual manera las tensiones políticas en el vecino Vietnam, arrastraron a Laos a la guerra; un factor destabilizante que contribuyó a la guerra civil y varios golpes de Estado. El Ejército norvietnamita invadió y ocupo porciones de territorio al este de Laos. Estados Unidos intervino en forma oculta a través de la operación “Estrella Blanca.” EE.UU., libraba la guerra de Vietnam y quería cortar las vías de suministros de Laos a su enemigo vietnamita y evitar que el país tomase la senda comunista. La manera de lograrlo es uno de los más desconocidos y brutales crímenes de guerra, jamás cometidos: aviones norteamericanos llevaron a cabo 584.000 misiones y arrojaron más de 260 millones de bombas, sobre zonas pobladas.
En 1968, el Ejército norvietnamita lanzo un ataque de varias divisiones contra el Ejército Real de Laos. El ataque resultó una amplia desmovilización del Ejército, y el dejar el conflicto en manos de fuerzas irregulares reunidas por los EE.UU. y Tailandia. En 1974, se formó una nueva coalición de Gobierno, donde sólo partidarios de Suvana Fuma y de Pathet Lao (movimientos políticos de tendencia comunista) se manifiestan contra la monarquía laosiana, lo que obliga a esta exiliarse a Francia. Esta guerra contra los comunistas, se desarrolló con gran tenacidad, especialmente por las unidades de la etnia Hmong, una feroz población laosiana de montaña a las órdenes del general Vang Pao. Los Hmong demostraron ser particularmente idóneos para estas características irregulares de combate.
Los mandos del Ejército norvietnamita le preocupaban notablemente las operaciones sin éxito de sus aliados del Pathet Lao.
En 1968, el Ejército regular norvietnamita asumió la dirección de las operaciones de combate de Laos y comenzó a enviar a sus propias unidades de apoyo a sus aliados del Pathet Lao contra el Ejército Real Laosiano (FAR-Forces Armées Du Royaume). A lo largo del año, las ingentes fuerzas comunistas consiguieron la retirada de las FAR, ocupando gran parte de la llamada “Llanura de las Jarras.”
El Tanque M48 Patton
Entre los otros éxitos norvietnamitas en Laos, cabe destacar el ataque y la destrucción de la estación de radar de la base aérea americana “Lima Site 85”, emplazada en la cima de una montaña. La presencia de las tropas americanas en Laos, estaba limitada a personal de la USAF con misiones de navegación aérea y a un limitado número de consejeros de las Fuerzas Especiales. Sin embargo, se le dieron como un discreto apoyo al Reino de Laos, hombres del Free World Forces (Australia, Nueva Zelanda, Corea del Sur, Taiwán y Tailandia) comprometidos normalmente con Vietnam del Sur.
En 1975, el comunista Pathet Lao, respaldado por la Unión Soviética y el Ejército norvietnamita, derrocó al Gobierno monárquico del Rey Savang Vatthana, abdicando el 2 de diciembre de 1975. El Gobierno de Pathet Lao firmó acuerdos, dando a Vietnam del Norte el derecho de destinar fuerzas militares y designar asesores para ayudar a supervisar al país. Se renombró este último como La República Popular de Laos. Las tropas vietnamitas se retiraron en el año 1990.
La Ofensiva norvietnamita de Primavera
En 1970, comenzó la retirada de las tropas estadounidenses, empezando por el personal de infantería, para terminar con los pilotos. El proceso de vietnamización se estaba llevando a cabo, se empezaba a transferir la responsabilidad del combate a las fuerzas militares del sur. Las tropas norteamericanas se encontraban ya, en una mínima expresión (asesores, pilotos y otros entre personal de tierra artillería y sanitarios) y los survietnamitas dependían prácticamente de ellos mismos.
Los comunistas hablaban de paz en París, pero preparaban la invasión de Vietnam del Sur. Su ofensiva de Pascua, a principios de 1972, como también se le conoce, estaba encaminada a destruir al Ejército survietnamita y a derrocar al Gobierno de Thieu. Unidades del Ejército norvietnamita y del vietcong penetraron por la fuerza en territorio del sur. Fue este esfuerzo más potente y mejor coordinado que el enemigo desarrolló para apoderarse de dicho país desde la ofensiva del Tet de 1968. La invasión estuvo a punto de desbaratar los planes norteamericanos de retirada del conflicto que había sido realizado con una integridad sin parangón. Aunque la ofensiva de 1972, fue militarmente un desastre, constituyó, sin embargo, un catalizador más potente que el Tet para las tendencias que en los Estados Unidos y en otros países se opusieron al creciente compromiso de las fuerzas aéreas y navales norteamericanas que pudieran inducir a los mandos militares a orillar la retirada unilateral del Vietnam. Esto agravó muchos asuntos controvertidos: el interés popular acerca de los prisioneros de guerra; las dudas de los militares acerca de la capacidad del Vietnam de mantener su soberanía; la insistencia del Presidente en afirmar que la retirada de tropas continuaba según lo programado; y las discusiones en el Congreso acerca de la carga económica que suponía apoyar al Gobierno survietnamita, la invasión de 1972 y las reacciones norteamericanas subsiguientes a ella, también influyeron fuertemente en el progreso de las prolongadas conversaciones de paz.
Del total de las operaciones que se llevaron a cabo en Vietnam, en sólo el 1% de los casos, se tenía contacto con el enemigo. Centenares de kilómetros en helicóptero, otros cuantos a pie, en busca de un enemigo crepuscular, ya que su búsqueda muchas veces resultaba en vano, desaparecían en la jungla y atacaban en otra parte
En los años que precedieron a la invasión, los norteamericanos habían traspasado a los survietnamitas muchas responsabilidades que contribuyeron a dar a los nativos una capacidad para enfrentarse a la agresión comunista. Como el proceso de vietnamización avanzaba, el Presidente Nixon planeó en 1969 una serie de fases graduales para acelerar la marcha del retiro. Para el 1º de mayo de 1972, había en Vietnam del Sur 68.200 soldados americanos, el número más bajo alcanzado en 7 años.
La invasión comunista en 1972, llamada algunas veces la ofensiva de Nguyen Hue, comprendía incursiones en tres de las cuatro regiones militares y comenzó con un devastador ataque contra el sur, a través de la zona desmilitarizada.
Los altos mandos survietnamitas y los asesores norteamericanos se preparaban para enfrentarse a una gran ofensiva comunista que creían se debía producir para las festividades del Tet a mediados de febrero. Los movimientos del enemigo aumentaron durante el mes de enero de 1972, lo mismo que la vigilancia de las fuerzas armadas norvietnamitas, pero el Tet pasó sin ningún incidente y la alerta militar fue relajándose. Mientras tanto, los mandos contemplaban la situación con inquietud: la invasión que esperaban iba a constituir una verdadera prueba para el plan de vietnamización e incluso se jugaba en el envite la posibilidad de un Vietnam no comunista.
El primer empuje de la invasión en la 1ª región militar fue realizada a través de la zona desmilitarizada en la provincia de Quang Tri, y fue acompañada de un avance hacia Hue. El ataque masivo comenzó el 30 de marzo de 1972, participando en él elementos de artillería, infantería y medios acorazados (T-54, T-34 t el PT-76 soviéticos), así como misiles SA-2 y SA-7 y el formidable cañón de 130mm. Dicho empuje arrolló a los survietnamitas de sus bases avanzadas de apoyo de fuego, cuyas instalaciones no estaban planeadas para resistir una invasión a toda regla.
Siguieron 2 meses de intensos combates con grandes bajas de un lado y otro. En la ciudad de Quang Tri, las unidades survietnamitas fueron sometidas a una intensa cortina de fuego de artillería de 130mm. Las tropas del sur de Vietnam en torno a la ciudad comenzaron a ser presas del pánico. Atemorizados y, en muchos casos, fuera del control de los mandos, se encaminaron nuevamente en dirección sur. Estas unidades abandonaron en su huida, tanques, artillería y camiones. Finalmente fueron establecidas nuevas posiciones defensivas a lo largo de la ribera sur del río Tach Ma, donde permanecieron los survietnamitas.
Artillero de puerta, patrulla la extensión de territorio en busca del vietcong
El 28 de junio, con apoyo de artillería y aviones norteamericanos, se logro detener la invasión y se lanzo una contraofensiva encaminada a recobrar el territorio perdido y a restaurar la confianza pública en las fuerzas armadas.
Después de dos meses de duro batallar, la ciudad de Quang Tri fue completamente recuperada el 16 de septiembre de 1972, por las tropas de infantería de marina survietnamita. Más adelante, y continuando hasta el cese al fuego, las fuerzas norvietnamitas destacadas en la 1ª zona militar irían tomando nuevamente el territorio que se habían visto obligados a ceder ante la contraofensiva.
An Loc, y en último término Saigón, constituían los principales objetivos comunistas, pero no fueron conseguidos. Sin embargo ya para 1973 las tropas norteamericanas abandonaban Vietnam del Sur y suspenden la ayuda a las naciones de Indochina, los comunistas aprovechan el período del cese al fuego para consolidar su poder acumulando moderno equipo soviético e incrementan la infiltración, lo que les permitía ganar terreno gradualmente.
Falso alto del fuego
Por otro lado, la mayoría de los ciudadanos norteamericanos miraron el cese al fuego de 1973, con entera satisfacción, complacidos con la liberación de los prisioneros de guerra y seguros que la matanza había terminado. Muy pocos repararon en que el Presidente Nixon afirmaba que el acuerdo suponía una <>. Pero la mayor parte de las fuerzas norvietnamitas permanecieron en el sur, empeñados todavía en conseguir una victoria comunista, y ahora libres de la amenaza de los ataques aéreos que trataban de impedírsela. Con unas fuerzas armadas demasiado dispersas como para poder desarrollar una defensa estratégica eficaz, el futuro del Vietnam del Sur parecía depender de que los Estados Unidos, quisieran repetir, en caso de emergencia, la intervención aeronaval que salvo al país en 1972.
Las garantías dadas por Nixon, con el fin de conseguir del Presidente Thieu su aprobación a los términos de paz acordados en París, junto con la promesa de continuar la ayuda económica y militar, parecían dar a Saigón una débil esperanza de poder sobrevivir a largo plazo. Pero a despecho del supuesto cese al fuego, los combates continuaron aproximadamente con la misma intensidad que la que tuvieron al comienzo de los años 60. Unos 145.000 soldados comunistas dominaban cerca de una tercera parte de la superficie de Vietnam del Sur.
Victoria comunista en Vietnam del Sur
El 29 de marzo de 1973, las últimas tropas norteamericanas abandonaron Vietnam. En los dos años siguientes, Hanói se rearmó y reconstruyó su industria, mientras que en el sur se deterioraba la situación social, al reducirse las subvenciones estadounidenses. El ejército permaneció en actitud defensiva, sin pasar a la acción, y la insurrección volvió a propagarse en las zonas rurales más castigadas. En 1974, se recrudeció la guerra en Camboya, y el 5 de marzo de 1975, Vietnam del Norte, desencadeno el ataque final.
El asalto comenzó en las tierras del centro del país, donde las fuerzas de Thieu retrocedieron en desbandada. Las divisiones del sur quedaron aisladas y se rindieron. Entre el 3 de abril, al 27 del mismo mes de 1975, y por ordenes del nuevo Presidente norteamericano Gerald Ford, sucesor de Nixon, se busco evacuar 150.000 personas, entre personal norteamericano, vietnamita y camboyano en aviones C-130 y C-141 de la Fuerza Aérea norteamericana, realizando un esfuerzo a gran escala, transportando a los refugiados hasta el campo Clark, en las islas filipinas, donde posteriormente serían trasladados a campamentos en las Islas de Guam y Wake. Dirigía el proceso de embarque y carga de los aviones, personal militar norteamericano. En esta humanitaria tarea, el Gobierno de los Estados Unidos recibió poco auxilio de los demás países del mundo libre.
En el interior, la marcha de los comunistas hacia Saigón alcanzaba etapas finales. El duro combate desarrollado en Xuan Loc, a 48 Km, al este de la capital, causó el aislamiento de algunas de las mejores unidades militares que todavía poseía el Gobierno. El Presidente Thieu anunció el 21 de abril su renuncia a través de la televisión, denunciando amargamente a los Estados Unidos, por abandonar a Vietnam del Sur, y dando publicidad a las garantías que le había dado el Presidente Nixon.
Misil tierra-aire SAM2 de fabricación soviética utilizado por las fuerzas de Vietnam del Norte. Estos cohetes infligieron graves pérdidas a la USAF
El Presidente Thieu fue sustituido por el anciano e ineficaz Vicepresidente, general Duong Van Minh, mientras que el carismático general Nguyen Cao Ky, permanecía al margen, hablando de organizar una defensa de Saigón semejante a la de Stanlingrado. La mañana del 30 de abril de 1975, el general Duong Van Minh, presidente por sólo dos días, dio a las tropas gubernamentales orden de alto al fuego. El Ejército se disolvió prontamente, los soldados se despojaban en la calle de sus uniformes y muchos de ellos se unieron a las turbas de saqueadores. Los tanques norvietnamitas que entraron por la noche en la ciudad sólo encontraron resistencia esporádica. Cinco horas después de que los últimos helicópteros hubieron partido, los tanques enemigos circulaban sin ningún obstáculo por los pórticos del Palacio de la Independencia. La caída de Saigón había sido, dichosamente incruenta.
Fin de la Segunda Parte