Mónica, la gallina canaria que cruzó el Polo Norte
Es la primera gallina exploradora del mundo y es canaria. El joven navegante Guirec Soudee afirma que «determinación, la perseverancia y la fe» le ha permitido hacer algo inédito en favor de la educación.
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Mónica es una gallina canaria algo bohemia. De momento, ya ha se puede decir que esta gallina de las islas es particular y que cuando llueve no se moja. Se moja con la brisa del mar. Es la gallina que se encontró en Canarias por casualidad el joven navegante francés Guirec Soudee, que este mes de septiembre ha cruzado el Polo Norte con la gallina a bordo.
Soudee estaba en Canarias sin un duro. Apenas tenía para comer. Y en un bar de playa le dieron una gallina para que hiciera un caldo o, al menos, pudiera alimentarse de ella. De esta experiencia del sol de Canarias ha salido un proyecto educativo con algo tan simple como llevar una gallina a las escuelas de sitios recónditos y helados.
Soudee se ha hecho famoso gracias a la historia de la gallina Mónica, aunque su dueño prefiere que llamen Monique. «Hoy más que nunca estoy convencido de que, con determinación, la perseverancia y la fe, es posible llevar a cabo tus proyectos, sean lo que sean y estén donde estén: en el fin del mundo o en la calle siguiente».
Soudee tiene 24 años y lleva dos años navegando en solitario por el mundo con la gallina canaria. Comenzó en su velero a navegar por la costa francesa y llegó a Canarias llamado por su interés por el windsurf. Se la entregaron en un bar tras pedir comida sin dinero.
Se conocieron y firmaron un acuerdo: él la llevaría a sitios donde nunca antes ha llegado una gallina en barco y ella, a cambio, le daba proteína en ese velero de 11.8 metros que, además de Groelandia, le ha permitido en septiembresuperar Bering, con lo estrecho que es. 32 días de navegación con 6.000 kilómetros de travesía.
Tras llegar a Groenlandia, aprovechó para cruzar el Estrecho de Bering. Desde ahí, quizás, a Santa Mónica, en California. Pero la travesía ha sido muy compleja. «Hielo a la deriva, las corrientes violentas, icebergs, el piloto automático no funcionaba por el polo magnético y dormir solamente 10 minutos y descansar otros 10; pero nuestros días estuvieron marcados por los colores azules, malvas, dorados, naranjas.. que dan al paisaje un parecido a una acuarela».
¿Y qué hacía la gallina canaria mientras tanto? «Los osos, focas y ballenas nos acompañaban. Ella estaba muy feliz de encontrar amigos y se pavoneaba con orgullo delante de ellos en la cubierta». La gallina canaria, que responde a las órdenes de su capitán en algo de español y francés, fue la sensación entre las escuelas que han visitado en ese tiempo, «sin experiencia y sin un euro».
Con ella, por simpatía, Guirec Soudee ha navegado por mares inhóspitos. Juntos han superado olas y resistido a las bajas temperaturas. Lo que se convirtió en una anécdota ya es un proyecto editorial que llega a las escuelas francesas como libro de texto.
Las aventuras de Guirec y Mónica se siguen en el plano digital con más de un millón de visitas y donde la protagonista es la gallina canaria. Mónica ha sido la primera gallina explotadora de la historia en el Polo Norte.
Ella y su contramestre han vivido en el Noroeste del territorio helado hasta el invierno del pasado año como si fueran Erasmus en España: pescado, arroz, pasta, huevos frescos por cortesía de Monique, que disfruta de todas las comodidades de un viaje en primera.
Mónica ha aprendido cosas: a nadar, a hacer remo y surf. Guirec, que cuenta con el respaldo técnológico de amigos durante la travesía, va a arrasar con los derechos de autor de los libros de texto de las escuelas.