Noviembre de 1896: los últimos regimientos valencianos que fueron a Cuba
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«Todos estos soldados recibían al salir dos pesetas, obsequio de la Diputación y el Ayuntamiento de Valencia»
En un artículo anterior del 4 de octubre, se narraban las salidas de las tropas expedicionarias a Cuba de los regimientos valencianos. Hoy recordaremos a las fuerzas que lo hicieron durante el mes de noviembre de 1896: una compañía de unos 200 hombres de cada regimiento de Infantería.
La III Región Militar abarcaba las provincias de Castellón, Valencia, Alicante, Cuenca, Albacete y Murcia, estando situada su cabecera en Valencia. En Castellón se encontraba el regimiento «Otumba»; en Valencia los de «Tetuán», Vizcaya»,»Mallorca» y «Guadalajara»; en Alicante el «Princesa» y en Cartagena los «España» y «Sevilla».
El 20 de noviembre de 1896, y en el vapor «Isla de Panay», salieron desde el puerto de Valencia las compañías del «Mallorca», «Vizcaya» y «Tetuán», además de otra del «Sevilla».En total 12 oficiales y 802 hombres de tropa, que se unieron a otros 4 oficiales y 420 de tropa que llegaron en el mismo vapor desde Barcelona.
Cuatro días más tarde, y en el vapor «San Ignacio», partieron desde Valencia otras cuatro compañías: «Princesa»,»Guadalajara», «España» y «Otumba»; en total 11 oficiales y 908 de tropa. Tanto estas como las anteriores compañías no fueron destinadas a sus respectivos batallones expedicionarios, sino a cubrir las bajas de otros.
Todos estos soldados recibían al salir 2 pesetas, obsequio de la Diputación y el Ayuntamiento de Valencia. Les despidieron en el puerto-según se puede leer en los diarios de la época – el Comandante General Sr. Moltó, el General Gobernador, el Cardenal Sancha, el Gobernador Interino, el Presidente de la Diputación, el Alcalde-precedido de los Maceros del Ayuntamiento-, Concejales, Diputados Provinciales y otras personalidades. También se encontraban para presenciar la salida otros generales de la guarnición y los jefes y oficiales francos de servicio.
Después de pasar revista a las tropas, el Comandante General pronunciaba una vibrante arenga, y unas palabras adecuadas para la situación del Cardenal, en un ambiente de entusiasmo general con los vivas acostumbrados. Poco después los barcos salían poniendo rumbo a Cuba.
Después de dos años en la Isla donde asistieron a una contienda fratricida que dejó muchos muertos en ambos bandos, llegó la paz y con ella la repatriación.
En el vapor «Dresden» llegaron a Valencia el 2 de enero de 1899 las fuerzas del «Tetuán» y el «Vizcaya»; las del «Mallorca» lo hicieron el 7 del mismo mes en el vapor «Darmstadt», y el 23 recibió nuestro puerto a los repatriados del «Guadalajara y el Princesa», llegados en el «Werra», un barco alemán como los dos anteriores. Dos compañías del «Otumba» desembarcaron en Alicante del «Villaverde» el 19 de diciembre de 1898 y las restantes en Málaga el día anterior del «Werra». El 30 de enero llegó al puerto de Cartagena el batallón del «España» en el vapor «Massilia».
Al igual que cuando partieron, recibieron a los que llegaron las primeras autoridades, junto con el delegado de la Cruz Roja en el caso del puerto de Valencia. No faltaba tampoco la sección de música, acompañando a los que llegaron muchísimas personas. Nada que ver con la descripción de las llegadas que hemos leído en algunos autores. Mientras que parte de los soldados enfermos eran llevados al hospital, otros eran atendidos en la posta que la Cruz Roja había instalado cerca de la zona del desembarco. Entre los facultativos que atendían a los enfermos se encontraba el doctor Moliner, cuya memoria recuerdan en Valencia el monumento que tiene en la Alameda y la calle que lleva su nombre, además de en otras localidades de la provincia.
En Valencia falta, en nuestra opinión, una calle dedicada a los «Héroes de la Guerra de Cuba», aquellos muchachos valencianos que fueron a la isla y de los que más de dos mil de nuestra provincia dejaron allí sus vidas.
Terminaremos con unas curiosas anécdotas recogidas de la prensa:
1ª. Aunque la alimentación en los barcos alemanes era sana y abundante, los soldados se quejaban de que no se adaptaba bien al gusto español.
2º. Entre los oficiales que volvieron con el «Guadalajara» se encontraba el teniente valenciano José Gomar, que había perdido un brazo y que obtuvo seis medallas al mérito militar.
3º. Con los soldados del «Mallorca» vino un cubano de 75 años que fue práctico de la guerrilla del regimiento Pizarro. No tenía familia y el jefe de la guerrilla le prometió que lo tendría siempre a su lado.
4º. Un soldado negro y tres mulatos formaban parte del batallón del «Mallorca», porque quisieron continuar sirviendo a España.
5º. Cuando desembarcaron los jefes y oficiales del «Tetuán» y el «Vizcaya», los vistas de Aduanas revisaron sus equipajes para que abonaran los correspondientes derechos por el tabaco que llevaban,»que ascenderá a una cantidad no despreciable» según leemos en los periódicos. ¡Justo premio a sus sacrificios en Cuba por lo visto!
* Enrique de Miguel Fernández-Carranza es Doctor en Historia y Académico de Número RACV, Grupo de Investigación de Historia Militar RACV
Origen: Noviembre de 1896: los últimos regimientos valencianos que fueron a Cuba
