UVB-76: la enigmática radio rusa que transmite sola desde hace 35 años y nadie sabe por qué

Hay radios legendarias, que durante años han marcado y siguen dejando su huella en la vida de muchas personas. Pero el caso de la UVB-76 (o MDZhB) probable

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Hay radios legendarias, que durante años han marcado y siguen dejando su huella en la vida de muchas personas. Pero el caso de la UVB-76 (o MDZhB) probablemente sea el más curioso, no solo porque hace 35 años que transmite sin parar, sino porque hasta el día de hoy aún no se sabe quién la dirige.

Se cree que transmite desde una locación de antenas de radio abandonadas desde la época de la Guerra Fría en las afueras de San Petersburgo, Rusia. Aunque también se dice que se encuentra cerca de Moscú, la capital del país. Pero no se puede confirmar.

El sonido de la transmisión es monótono, un zumbido continuo -repetido a un promedio de 25 pulsos por minuto- que es interrumpido cada un par de segundos por un ruido “fantasmal”, como si fuera “un barco haciendo sonar su sirena de niebla”, señala la periodista Zaria Gorvett en un artículo para la BBC.

Como “programa destacado”, y en muy raras ocasiones, se escucha la voz de un hombre o una mujer que dicen algunas palabras en ruso, sin mucho sentido, tales como “bote inflable” o  “especialista en agricultura”, explica Gorvett.

En cualquier lugar del mundo se puede escuchar MDZhB

Al ser una radio de onda corta, la transmisión de MDZhB tiene la peculiaridad de rebotar en la ionosfera, permitiendo recorrer en zig-zag miles de kilómetros. De tal manera que puede escucharse en todo el mundo, a través de la frecuencia AM 4625 kHz.

Y aunque a muchos podría parecerles aburrido oír “The  Buzzer” (“El Zumbador”), como le llama cariñosamente su audiencia, esta radio tiene miles de seguidores alrededor de los cinco continentes.

Sin embargo, nadie sabe qué está escuchando. O eso es lo que se cree.

 Transmisiones misteriosas

Si bien el característico zumbido –el cual sigue en vigencia aún hoy- comenzó a principios de los años 90, el 16 de enero de 2003 se escuchó un breve cambio en el tono de la grabación (aproximadamente 20 zumbidos por minuto), que rápidamente fue revertido.

En ocasiones, se han escuchado conversaciones lejanas y otros ruidos desde atrás del micrófono, lo que significa que el zumbido no es generado internamente sino que se produce porque un dispositivo es colocado detrás del micrófono en directo (que siempre está abierto).

El 3 de noviembre de 2001 probablemente alguien activó sin querer el micrófono y se escuchó una conversación en ruso entre dos personas: “Soy el 143 no recibo el oscilador”, dice una primera voz masculina, seguida de otra femenina que agrega: “Eso viene de la sala de operaciones”.

Misteriosamente, se escucharon esas mismas voces en varias ocasiones haciendo la cuenta regresiva del 1 al 10.​

El 3 de diciembre de 2002, en el horario de mantenimiento: 7:00 – 7:50 UTC, se escuchó una voz masculina probando el micrófono.

También hubo espacios para el arte. El 2 de septiembre de 2010 se transmitió en varias oportunidades fragmentos del Lago de los Cisnes de Chaikovski.

Las hipótesis

Nadie sabe a ciencia cierta la finalidad de esta señal, pero hay varias hipótesis, algunas muy curiosas: desde un mecanismo que -de detenerse- indicaría que Rusia fue atacada con una bomba nuclear, pasando porque es una forma de medir la altura de la ionosfera hasta un sistema de comunicación extraterrestre.

La explicación que ha ganado más aceptación es que la frecuencia pertenece a las fuerzas armadas rusas. Aunque estas nunca lo reconocieron.

La realidad es que la radio comenzó su peculiar transmisión hacia el final de la Guerra Fría, cuando se avecinaba el fin del bloque soviético.

Con la caída del comunismo ruso, extrañamente la señal siguió, hasta nuestros días.

Por eso la teoría más aceptada es que el zumbido serviría de señal si Rusia es blanco de un ataque nuclear. En caso de que se dé este hipotético escenario, la señal de detendría y dispararía automáticamente un bombardeo con objetivos predefinidos.

De hecho, este sistema fue utilizado por primera vez en la era soviética, tomando la forma de un sistema informático que escaneaba las ondas de radio en busca de señales de vida o lluvia atómica.

También es muy difundida la versión en que UVB-76 es una “estación de números”, utilizada para transmitir mensajes codificados a espías rusos. Estas emisoras fueron muy populares –y aún siguen vigentes- en las frecuencias de onda corta. Tienen como finalidad enviar claves de números para el intercambio de mensajes secretos con agentes infiltrados.

La principal ventaja de este tipo de estaciones es que a pesar de que todos pueden saber quién está emitiendo, nadie sabe a quién va dirigido el mensaje, ya que puede recibirse en todo el planeta.

Se trata de un sistema de encriptación que se basa en el intercambio de una serie de números, con los que se codifica otro mensaje que se envía por otro medio. Como la clave es aleatoria y se usa una sola vez, lo que se transmite es indescifrable.

Por eso esta teoría dice que el zumbido existe solo para ocupar la frecuencia (y que nadie más la use) y emitir claves de números solo en caso de una emergencia nacional.

Incluso hay especulaciones de que, por la gran potencia de la antena, la estación podría estar enviando mensajes hacia el espacio exterior.

Son demasiadas las teorías y muy poca la información precisa. Lo cierto es que el propósito de las emisiones continúa siendo un misterio, aún hoy.

Origen: UVB-76: la enigmática radio rusa que transmite sola desde hace 35 años y nadie sabe por qué